LIMPIEZA DE LOS COMPONENTES DE LAMINAM (GRES PORCELÁNICO)
Para la limpieza de todos los días de las superficies de Laminam aconsejamos utilizar agua caliente y detergentes neutros (ej. jabón o detergentes para superficies), utilizando un pañuelo o una esponja suave, enjuagando con abundante agua y secando la superficie con paños suaves o papel secante. Para evitar que se formen manchas mates, se aconseja evitar el uso de productos que contengan cera. Recomendamos no utilizar detergentes o esponjas abrasivas. Algunas manchas, si no se tratan con rapidez, pueden quedarse más o menos visibles según el tipo de acabado. En el caso de que se derramen líquidos como té, café, vino rojo, secar rápidamente la superficie con un paño y no dispersar el líquido. Cuanto más permanece la mancha en la superficie, más difícil será su remoción. Humedecer un trapo con lejía y friccionar un poco la superficie. La mayoría de las manchas desaparecerán después de unos pocos minutos de la aplicación. Alternativamente, se puede aplicar el producto directamente en la superficie pero la puesta debe limitarse a 10 minutos. A continuación, enjuagar con cuidado y abundante agua y por último secar la superficie. Si es necesario, repetir el proceso más de una vez. No aumentar el tiempo de contacto. Es posible utilizar productos ácidos como descalcificadores, acetona y amoníaco. En ningún caso utilizar esponjas u otros productos abrasivos, como detergentes que contengan partículas abrasivas o utensilios de acero. No utilizar productos con un fuerte pH básico (superior a 11) en el proceso de limpieza. Utilizar siempre la tabla de cortar. Tener cuidado con los impactos debidos a la caída de utensilios desde arriba o de objetos pesados ya que podrían dañar la superficie del plano. Evitar el contacto con adhesivos y siliconas porque, una vez endurecidos, su reducción no siempre es posible. Evitar arrastrar objetos como vajillas, ollas, cuchillos y, en general, objetos duros en el plano. Utilizar siempre tablas para cortar, salvamanteles y posavasos para evitar que los objetos dañen la superficie. En ningún caso utilizar esponjas o productos abrasivos, como detergentes que contengan partículas abrasivas.